La liquidación de impuestos en un testamento es un proceso fundamental cuando se trata de herencias y sucesiones. Aquí te explico cómo funciona:
- Plazos para Liquidarlo:
Los herederos tienen seis meses desde el fallecimiento del ser querido para liquidar el Impuesto de Sucesiones ante la Administración Tributaria.
Este plazo es crucial para recibir la herencia. - Documentación Necesaria:
Certificado de Defunción: Solicita este certificado en el Registro Civil, proporcionando la identificación del difunto y la fecha de fallecimiento.
Certificado de Actos de Última Voluntad: Indica si el difunto otorgó testamento. Si lo hizo, la notaría indicará dónde obtener una copia.
Declaración de Herederos: Si no hay testamento, se necesita este documento.
Inventario y Valoración de Bienes: Enumera y valora los bienes, derechos y obligaciones de la herencia. - Formas de liquidación:
Liquidación Administrativa:
Presenta la documentación necesaria y solicita que la Administración Tributaria determine la deuda.
La Administración notificará el resultado, indicando la cantidad y el plazo para el pago.
Inconveniente: Si hay depósitos o cuentas corrientes en la herencia, las entidades financieras no entregarán los bienes hasta que se acredite el pago o la exención del impuesto.
Autoliquidación:
Los herederos calculan y presentan la liquidación por sí mismos.
Deben ingresar el importe correspondiente dentro del plazo establecido.